sábado, 23 de junio de 2007

Dónde estás?
Sólo quiero saber de ti…
Quiero verte aparecer, desde lejos, y sentir ese cosquilleo que nace en la boca de mi estómago, acelerando mis latidos
Que te acerques luego, y tener que luchar con estas ganas de robarte un beso
Quiero sentir tu mirada sobre mi cuerpo, tus palabras en mi oído, tus manos sobre mi piel
Anhelo el sabor de tus besos, cuando nadie nos ve
Ansío tenerte, cerca mío, alrededor mío, dentro mío
Y en definitiva, te deseoy aun sabiendo que esta es una batalla perdida de antemano, quiero darla, porque eso me basta
Me basta con, algunas veces por día, ser dueña de tus pensamientos
Me basta con que me digas todas aquellas cosas que avivan más aún mis ansias por ti
Me basta con sentirme deseada por ti
Me basta con que me digas
Que en tu mente siempre da vueltas el deseo de tenerme
Que todo tu ser no desea otra cosa que hacerlo realidad
Que me piensas a cada momento, que hasta te cuesta concentrarte
Que me necesitas
Y por todo esto, quiero saber de ti, ahora
Porque ya no resisto el sólo hecho de imaginarte
Pensarte y desearte, y tú ausente, pero supongo que así es como debe ser
Y me basta, al menos por ahora
Porque sé que no puedes regalarme más que momentos intensos, palabras ardientes, besos fugaces
(Y puedes entregarme lo que te pida, excepto tu corazón)
Y todo esto daría lo mismo si justo ahora surgieras de la nada, e hicieras realidad todo lo que por hoy son ensueños tan sólo…


jueves, 7 de junio de 2007


"Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua".


Rayuela (Capitulo 7)